8 de abril de 2012

Liqen | Plasencia

Salir de Madrid sin rumbo a otra gran ciudad supone, como ya he contado otras veces, que deba agarrarme casi siempre, en pueblos y carreteras, a otra pintura en la pared, en una manera -a veces absurda- de seguir con una actividad -algo más que fotográfica- que me mantenga unido durante mi ausencia -con una especie de cordón umbilical- a aquello que he dejado atrás. Pero a veces hay sorpresas, y una mañana de principios de abril, volviendo de Béjar hacia Madrid, llegas con tu familia a un enorme aparcamiento en Plasencia, Cáceres, y te das de bruces con este mural de Liqen. Y el subidón es considerable, claro.



Según cuenta el propio Liqen, el mural, pintado junto a Sylviane Michel en agosto de 2009, está dedicado a un caballo que corría por donde ahora está el enorme parking, en el parque de La Isla. 


Gracias.

2 comentarios:

Stultifer dijo...

Vengo a pedir, que es mejor que robar. Esta temporada nos ha dado por los cementerios. Queremos tus fotos. Saludos cordialísimos.

Jorge dijo...

Guillermo!!!!

Me alegra comunicarte que te he recomendado para los premios LIEBSTER:

http://outsidermag.blogspot.com/2012/04/premios-liebster.html

Abrazos grandes!!

Jorge

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