Nuria, calle Lavapiés. Junio de 2010 y arqueología.

Me han dicho que Nuria ha estado activa en Lavapiés últimamente. Dicen que en el CSA de La Tabacalera. Que en el solar de Esta es una plaza. Que en el lateral del Teatro Valle-Inclán, en la calle Valencia... Yo, recluido, no he podido verlo más que en fotografía, como decía aquel. Hasta el pasado jueves, en que camino de casa pasé por la calle Lavapiés, por ese lateral mágico que tantos momentazos ha acumulado en los últimos (mínimo) seis años (que me enrollo) y di con la obra que veis aquí debajo.

En esta última imagen, alguien firmó con tiza junto a la obra.

En algunos de los espacios dejados por el azul de esta sólida, compacta y armada pieza de Nuria se puede intuir parte del pasado de la chapa granate, una historia que pasa fundamentalmente por obras bien de la propia Nuria, bien de estrechos colaboradores, como Eltono o Nano4814. Y aquí es donde tiramos de archivo, de hemeroteca, y empezamos a ponernos arqueológicos.

Algunos restos de pintura naranja y una suave línea negra nos dicen que allí estuvo, desde junio de 2005, un personaje pelirrojo que, enredado en una llave, alargaba la mano hasta otra chapa cercana en la que mostrar o acariciar un estupendo (e inconfundible) calamar.

La chapa en la que habitaba el calamar fue utilizada por la propia Nuria en mayo de 2007 para una pieza bicolor construida en tres fases: rosa + líneas de color + verde. Entonces aún podía intuirse su colaboración con Nano4814. Aquí debajo.

Otra chapa más se sitúa apenas un metro más allá según bajamos la calle. Sobre ella estuvo una vez una de las pocas obras curvas de Eltono, creada a mediados de 2004, y que hace no tanto devolví temporalmente a su sitio.

Por último, otro par de metros más abajo, pegado a la farola, aún está el espejito que Eltono colocó como parte de la acción "La luz de aquella farola", hace ya muchos años. Surgió como una doble intervención de Eltono y Nuria, en la que dos espejos (el de Nuria en la farola de la otra acera, un poco más abajo) reflejaban sobre la pared las inconfundibles formas de la llave y el diapasón. A mediados de 2004 ya no estaba el de Nuria, y el de Eltono lucía según veis aquí abajo; a día de hoy -me parece que por un cambio en las bombillas- ni siquiera genera el efecto original, pero ahí sigue el espejito espejito.